viernes, 29 de mayo de 2009

Los blogs


En la actualidad existen millones de blogs en el mundo infinito de la red. Los jóvenes (y no es que yo me sienta tan viejo, aquí más bien me refiero a los adolescentes o a quienes acaban de pasar esta etapa de su vida) son los mas propensos a crear su espacio, ya que les funciona o lo utilizan a modo de diario personal. En estos espacios virtuales encontramos de todo: fotos personales, clubes de amigos, escritos sobre casi cualquier cosa, vídeos, bibliotecas virtuales donde puedes bajar todo tipo de literatura o libros sobre temas específicos, en fin, son lugares que abarcan los más variados y diferentes gustos e intereses de los cibernautas.
Concuerdo con Jaime Muñoz Vargas, los blogs -de cierta forma- es como si se tratara de grupos de personas hablando acerca de temas misceláneos en el interior de una cantina; la mayor parte de las voces se pierden en el abismo virtual. Aun con esto, hay blogs bastante interesantes y muy buenos en contenido, sobre todo los que pertenecen a escritores, periodistas, historiadores y gente dedicada al arte en alguna o algunas de sus múltiples disciplinas.
Un blog bastante completo e interesante, trata sobre historia y temas relevantes de los días que estamos viviendo, es el del Dr. Sergio Antonio Corona Páez; su espacio histórico es muy frecuentado (http://www.cronicadetorreon.blogspot.com/).
Sobre literatura, abarcando artículos y entrevistas sobre buenos autores y sus libros además de reseñas, esta el espacio de Vicente Alfonso (http://www.elsindromedeesquilo.blogspot.com/), un muy buen escritor torreonense.
No puede faltar el lugar personal del gran narrador lagunero Jaime Muñoz Vargas(http://www.rutanortelaguna.blogspot.com/), donde, además de subir su columna de Ruta Norte que publica en La Opinión Milenio, exhibe la portada de los libros que ha publicado, los concursos literarios que ha ganado, todo su currículo como escritor y periodista, e incluso secciones especiales que tratan sobre conferencias y talleres literarios.
Un blog más, y que sigo de vez en cuando, es el de Frino, lugar amontonado, original y variado en la red de pandora (http://www.cortandorabanos.blogspot.com/), músico y escritor, también torreonense y de los buenos; sus poemas son muy originales y absorbentes.
Menciono solo algunos de los blogs que sigo y que son de personajes laguneros conocidos dentro del mundo cultural de la región; ellos tres han sido reconocidos a nivel nacional con sus premios y publicaciones. Así como estos espacios hay infinidad de lugares virtuales, algunos muy buenos, sin importar muchas veces que se trate de jóvenes o personas anónimas que desean dar a conocer sus inquietudes, sus obsesiones, sus deseos, su vida personal -como comentaba- en forma de diario, sus poemas, sus cuentos, sus escritos y textos de todo tipo, también de su autoría; esto a falta de espacios en publicaciones de papel o virtuales.
Si conoces blogs cuyo contenido es interesante y que además la calidad se hace notar, recomiéndalos y pasa la voz; así, oxigenamos la posibilidad de que no se pierdan como cualquier charla de cantina.

jueves, 28 de mayo de 2009

El otro trabajo del escritor


En un gran número de las actividades económicas del país se encuentra uno con la pasividad, si no en su máxima expresión, por lo menos con el amplio margen de su sombra. Los escritores mexicanos, en su gran mayoría, se dedican a las letras por amor al arte. Son pocos los casos donde un literato vive en forma holgada de lo que escribe. Y es que en nuestra querida patria, donde el mexicano promedio lee de uno a dos libros por año, el oficio de la letras está muy degradado. Si quieres comprobarlo por ti mismo, comenta con alguno de tus amigos o familiares que eres escritor, o que deseas ser escritor, y pasara una de dos cosas (quizá ambas): la persona se quedará seria pensando en la pregunta ¿que es un escritor? y tratará de formarse una idea de que es lo que hace o que es lo escribe; o de plano, suponiendo que sea lector y que tenga un mínimo conocimiento del oficio del escritor, suelte una carcajada y te diga "mejor dedicate a algo que si sea trabajar".
Como menciono, los escritores mexicanos generalmente tienen dos oficios: el de escribir, que es por amor al arte; y por otro lado, la actividad que les da para comer, o mal comer, en el peor de los casos. Siendo justos, no es algo que padezcan solo nuestros literatos; es una epidemia que a duras penas deja sobrevivir a casi cualquier escritor latinoamericano. Dichoso aquel que tiene el desahogado poder de elegir a que dedicar su vida debido a que cuenta con una gran capacidad económica que lo respalda; dos casos conocidos de semejante situación son Borges y Bioy Casares.
Expongo el comentario debido a que en estos últimos días he pensado como han de estar preocupados, como todos, los buenos escritores de nuestro México lindo y querido; preocupados por el pan nuestro de cada día y, aunque tal vez involuntariamente, distraídos de la actividad creativa que les llena por completo el corazón: la literatura.
Chejov comenta, en relación a su actividad como escritor, lo siguiente: Cuando escribo no tengo la impresión de que mis historias sean tristes. En cualquier caso, cuando trabajo estoy siempre de buen humor. Cuanto más alegre es mi vida, mas sombríos son los relatos que escribo.
Cervantes es todo un caso excepcional de como se puede escribir magnánimamente, y en forma jocosa, aun cuando se pasa por una situación económica adversa. Pero Cervantes es Cervantes, la mayoría de los mortales que padecemos el capricho de ser escritores necesitamos el estímulo de la tranquilidad para poder dar rienda suelta a la pluma, a la máquina de escribir o al teclado del ordenador. Esto se puede conseguir teniendo un ingreso salarial decente, si no por el trabajo literario, por lo menos en la actividad que se desempeña para sobrevivir.
Con la clase política mexicana que nos tocó mantener y sufrir -cual si fuese el hijo pródigo, pero sin traza alguna de arrepentirse- lo único que podemos hacer es trabajar duro, a pesar de todo, y rezar por que las cosas mejoren, tanto en México como en el mundo. No queda de otra. Ah, claro, y leer, leer y leer mucho; y escribir, escribir y escribir mucho, como desquiciado si es necesario. Dichosos los buenos escritores americanos y europeos que, además de la posibilidad de llegar a ser celebridades, pueden vivir de lo que escriben.
Envío un saludo y un caluroso abrazo a todos los colegas escritores que, a pesar de la adversidad, no abandonan su compromiso con las letras.

jueves, 21 de mayo de 2009

¿Que hace a un escritor un buen escritor?


Según los grandes escritores, los que han decidido dar a conocer los secretos del oficio de las letras, se llega a ser buen escritor mediante dos acciones permanentes: Leer mucho y escribir mucho. Sin embargo, considero que además de abrazar con disciplina estos dos hábitos, también es necesario tener un grado alto de sensibilidad y un grado -aun mas alto- de imaginación, para así poder llegar al corazón de las personas y atraparlos como lectores. No hay que olvidar que las historias deben de ser interesantes. Un escritor que encontró la forma de combinar todos estos ingredientes en sus poemas, en sus cuentos, en sus novelas, en sus ensayos, y en general en toda la literatura que producía, fue Mario Bendetti. Algunos intelectuales y escritores, buenos escritores, lo han tildado de rosa, de cursi. Tal vez a ellos les guste mas la literatura aguerrida o violenta; o quizá la excelentemente escrita, pero aburrida; o puede ser que solo la que ellos producen; no lo se a ciencia cierta. Pero Benedetti es un gran escritor (y digo "es", porque su vigencia no tiene caducidad); que mejor prueba que las altas ventas de sus libros, su gran producción literaria, el shock que causó su muerte -no solo en el mundo literario, si no en toda la gente- y el reconocimiento de su gran calidad literaria por maestros escritores como Saúl Rosales.
Deseo dedicar este post a Mario Benedetti, como un humilde homenaje, tratando de que sirva un poco para aceptar y afrontar el dolor de su partida. No se imagina como lo vamos a echar de menos en este mundo Don Mario.
Y como siempre comento, no hay mejor forma de reconocer y recordar a un tremendo escritor, que leyéndolo. Van dos poemas y un cuento del maestro, uruguayo por nacimiento, pero universal por sus letras.

POEMAS

Táctica y estrategia

Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos

mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible

mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme con vos
mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos

Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple

Mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.

Viceversa

Tengo miedo de verte
necesidad de verte
esperanza de verte
desazones de verte

tengo ganas de hallarte
preocupación de hallarte
certidumbre de hallarte
pobres dudas de hallarte

tengo urgencia de oírte
alegría de oírte
buena suerte de oírte
y temores de oírte

o sea
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo
y también
viceversa.


CUENTO

El Otro Yo

Se trataba de un muchacho corriente: en los pantalones se le formaban rodilleras, leía historietas, hacía ruido cuando comía, se metía los dedos a la naríz, roncaba en la siesta, se llamaba Armando Corriente en todo menos en una cosa: tenía Otro Yo.
El Otro Yo usaba cierta poesía en la mirada, se enamoraba de las actrices, mentía cautelosamente , se emocionaba en los atardeceres. Al muchacho le preocupaba mucho su Otro Yo y le hacía sentirse incómodo frente a sus amigos. Por otra parte el Otro Yo era melancólico, y debido a ello, Armando no podía ser tan vulgar como era su deseo.
Una tarde Armando llegó cansado del trabajo, se quitó los zapatos, movió lentamente los dedos de los pies y encendió la radio. En la radio estaba Mozart, pero el muchacho se durmió. Cuando despertó el Otro Yo lloraba con desconsuelo. En el primer momento, el muchacho no supo que hacer, pero después se rehizo e insultó concienzudamente al Otro Yo. Este no dijo nada, pero a la mañama siguiente se habia suicidado.
Al principio la muerte del Otro Yo fue un rudo golpe para el pobre Armando, pero enseguida pensó que ahora sí podría ser enteramente vulgar. Ese pensamiento lo reconfortó.
Sólo llevaba cinco días de luto, cuando salió a la calle con el propósito de lucir su nueva y completa vulgaridad. Desde lejos vio que se acercaban sus amigos. Eso le lleno de felicidad e inmediatamente estalló en risotadas.
Sin embargo, cuando pasaron junto a él, ellos no notaron su presencia. Para peor de males, el muchacho alcanzó a escuchar que comentaban: «Pobre Armando. Y pensar que parecía tan fuerte y saludable».
El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reír y, al mismo tiempo, sintió a la altura del esternón un ahogo que se parecía bastante a la nostalgia. Pero no pudo sentir auténtica melancolía, porque toda la melancolía se la había llevado el Otro Yo.

lunes, 18 de mayo de 2009

Mario Benedetti


El fin de semana pasado -el domingo, para ser exactos- falleció Mario Benedetti. Aunque se nos adelantó en ese camino inevitable e insondable, nos deja su prolífica obra literaria. Una de mis novelas favoritas de él es Quien de nosotros, por su estupenda forma de manejar tres géneros literarios en ella: el dialogo interior, la epístola y el cuento.
Muchas gracias maestro Benedetti por tantos momentos intensos.
Transcribo la nota sobre su muerte aparecida hoy en El Siglo de Torreón.


Las letras están de luto
Por: EFE
Lunes, 18 de Mayo de 2009

Muere el escritor Mario Benedetti y deja ‘huérfana’ la literatura uruguaya.

Montevideo, Uruguay.- El escritor Mario Benedetti murió ayer en Montevideo a los 88 años y dejó huérfana a la literatura uruguaya y latinoamericana de uno de sus poetas y narradores más prolíficos, venerado por generaciones por su ética social y su melancólico canto a la vida.
Galardonado en 1999 con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y en 2005 con el Internacional Menéndez Pelayo, Benedetti abordó todos los géneros literarios, en los que reflejó una mirada crítica de izquierdas que le llevaría al exilio y a ser, hasta sus últimos días, un firme detractor de la política exterior de Estados Unidos.
Sus poesías fueron cantadas por autores como Joan Manuel Serrat, Daniel Viglietti, Nacha Guevara, Luis Pastor o Pedro Guerra, y sus novelas más famosas llevadas al cine, como La Tregua (1974) o Gracias Por el Fuego (1985), a cargo del director argentino Sergio Renán.

SU COMPLICADA SALUD
El escritor estuvo hospitalizado cuatro veces el año pasado en Montevideo debido a diversos problemas físicos.
La primera vez entre enero y febrero de 2008 tras sufrir una enterocolitis que le causó deshidratación; la segunda vez en marzo, con problemas respiratorios, y por tercera vez, en mayo del pasado año a causa de una descompensación general.
La última, desde el pasado 24 de abril hasta el 6 de mayo, cuando el escritor recibió el alta médica y regresó a su domicilio tras doce días de internación al agravarse una enfermedad intestinal crónica.
Benedetti fue autor de más de ochenta libros de poesía, novelas, cuentos y ensayos, así como de guiones de cine, fue galardonado con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (1999), el Premio Iberoamericano José Martí (2001) y el Premio Internacional Menéndez Pelayo (2005).
Su última obra publicada, el poemario Testigo de Uno Mismo, fue presentada en agosto del año pasado.
Antes de su último ingreso, Benedetti estaba trabajando en un nuevo libro de poesía cuyo título provisional es “Biografía Para Encontrarme.

ENTRE LITERATURA Y CRÍTICA POLÍTICA
Mario Orlando Hamlet Hardy Brenno Benedetti Farugia, mejor conocido como Mario Benedetti, fue un grande de la literatura de habla hispana:
Este exponente por antonomasia de la llamada generación uruguaya de 1945, la “generación crítica”, nació el 14 de septiembre de 1920 en Paso de los Toros, en el Departamento de Tacuarembo.
En 1928 comenzó sus estudios primarios en el Colegio Alemán de Montevideo, donde, según contaba el propio Benedetti, gustaba de escribir en verso las lecciones e incluso sorprendió a sus maestros con un primer poema en ese idioma.
Las dificultades económicas sólo le permitieron cursar un año de educación secundaria en el Liceo Miranda y después tuvo que ser casi autodidacta, compaginando los estudios con el trabajo, que comenzó a los 14 años en un taller de repuestos de automóvil.
Antes de dedicarse a la escritura, Benedetti hizo de taquígrafo, cajero, vendedor, librero, periodista, traductor, empleado público y comercial.
Entre 1938 y 1941 residió en Buenos Aires y en 1945 ingresó en el semanario Marcha como redactor y publicó su primer libro, La víspera indeleble, de poesía.
En 1949 Benedetti avanzó en su carrera periodística con su labor en la destacada revista literaria Número, compaginando al tiempo sus tareas de crítico con una carrera imparable como escritor. Así, en una década trepidante publicó obras como Esta Mañana y Otros Cuentos (1949), Poemas de Oficina (1956), Ida y Vuelta (1958) y La Tregua (1960).
Residió en París entre 1966 y 1967, donde trabajó como traductor y locutor para la Radio y Televisión Francesa, y luego de taquígrafo y traductor para la UNESCO.
En 1968 fundó en La Habana el Centro de Investigaciones Literarias de la Casa de las Américas, que dirigió hasta 1971, y encabezó el Departamento de Literatura Latinoamericana de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de Montevideo, entre 1971 y 1973.
En los setenta desarrolló una intensa actividad política, como dirigente del Movimiento 26 de Marzo, del que fue cofundador en 1971 y al que representó en el Frente Amplio, coalición izquierdista que alcanzó el poder en 2005.
Con el golpe militar de 1973 renunció a su cargo universitario y se exilió, primero en Argentina y después en Perú, donde fue detenido, deportado y amnistiado.
Se instaló en Cuba en 1976 y un año más tarde se trasladó a Madrid, donde permaneció hasta 1985, cuando, con el fin de la dictadura uruguaya, puso fin a doce años de exilio.
En 1984 publicó Geografías y El desexilio y otras conjeturas y tres años después, tras volver a Uruguay, se convirtió en miembro del Consejo Editor de la revista de izquierdas Brecha.
De 1985 data su colaboración con Joan Manuel Serrat en el disco El Sur También Existe.
El escritor, doctor Honoris Causa por universidades de España, Uruguay y Argentina, enviudó en 2006 de Luz López Alegre, con quien se había casado en 1946.
En agosto de 2008 presentó Testigo de uno mismo, su último poemario, un “resumen” de su carrera que lo reafirmó como una de las piedras angulares de la poesía latinoamericana, según la escritora Sylvia Lago.

UN RECONOCIDO ESCRITOR
Benedetti recibió numerosas distinciones, entre ellas la Medalla Haydee Santamaría del 30 aniversario de la Casa de las Américas en La Habana (1989) y la Medalla Gabriela Mistral del Gobierno chileno (1996).
Además, el premio León Felipe de España a los valores cívicos (1997), el Iberoamericano José Martí y el Internacional italiano de Literatura La Cultura del Mar, ambos en 2001, año en que también fue nombrado “Ciudadano Ilustre de Montevideo”. En 2007 fue condecorado con la Orden Francisco de Miranda en grado de ‘generalísimo’ por el Gobierno venezolano y en 2008 obtuvo el I Premio ALBA del Fondo Cultural de la Alternativa Bolivariana para las Américas en la categoría.